📢 ¿Vendes por Instagram? ¡Ojo! El SII te está mirando la cuenta (y no es por darle like)



Seamos honestos. Para muchos, emprender empezó casi como un accidente. Subiste unas fotos de tus tejidos, mermeladas o servicios de diseño gráfico a Instagram, un par de amigos te compraron y, de repente, tienes un pequeño flujo de caja que se maneja con transferencias bancarias y emojis de manos en el chat.

La vida era sencilla. No había formularios, ni IVA, ni el fantasma del Servicio de Impuestos Internos (SII) merodeando. Era la informalidad feliz, una especie de economía paralela donde el único requisito era tener buena bio en redes.

Pues bien, si esa es tu realidad, tenemos una noticia para ti: el recreo se acabó.

La nueva realidad tributaria en Chile (impulsada, sí, por la famosa Ley de Cumplimiento Tributario) le ha dado al SII un nuevo súper poder: la capacidad de mirar de cerca las transacciones bancarias de todos. Y esto cambia las reglas del juego para cualquiera que venda un producto o preste un
servicio.


🧐 La venta no es amistad: el criterio de la ley

La confusión principal es esta: la ley chilena dice que cualquier actividad económica que produzca renta debe formalizarse. No importa si lo haces en un local comercial o desde el sofá con el delivery llegando a tu casa.

Antes, si vendías 500 maceteros al año, el SII no tenía cómo saberlo (salvo una fiscalización directa). Hoy eso cambió.


💰 El chivato bancario: 50 y 100

Ahora, la ley ha puesto a los bancos a trabajar para el SII. El secreto bancario es ahora relativo, y esto afecta directamente a la persona natural que cobra por transferencia:


Las instituciones financieras están obligadas a informar al SII sobre las cuentas que superen estos umbrales en un período determinado: 50 o más abonos de distintas personas en un mes, o más de 100 abonos en un semestre. 


Traducción en términos de calle: si le vendes a 51 personas distintas en junio, tu banco le levanta una bandera al SII diciendo “ojo con esta cuenta, tiene actividad comercial evidente”.


La intención de esta medida es clara: combatir la informalidad. El SII no busca perseguir a quien recibe una transferencia de su mamá para el cumpleaños; busca a quien está generando renta y no está emitiendo la boleta o factura correspondiente.


🛑 El dilema: formalizarse o jugar a las escondidas

Para cualquiera que tenga una actividad económica regular, la pregunta no es si debe formalizarse, sino cuándo y cómo hacerlo. La mayoría solo ve el costo. Pero, como en la bolsa, hay que ver el retorno de la inversión.


La formalización: de gasto a inversión 🚀

Si vendes un producto o prestas un servicio (diseño, clases, coaching, reparaciones, etc.), tu camino es iniciar actividades. Y si bien esto implica formularios y trámites (que han mejorado mucho), el beneficio es mucho mayor que el costo de la boleta:

  • Poder de facturación: Si le vendes a otra empresa, te pedirán factura. Sin ella, estás fuera del mercado B2B (Business-to-Business), que es donde está la plata grande y constante. La boleta te permite jugar en las ligas mayores.
  • Financiamiento y respaldo: Los bancos y las instituciones de inversión no le prestan plata a un negocio que solo existe en Instagram. Necesitan ver las declaraciones de impuestos (F29, Renta) para probar tu flujo de caja. Si quieres un crédito para una máquina nueva o para capital de trabajo, el papelito te lo da el SII.
  • Beneficios Pyme:  Solo estando formalizado puedes acceder a programas de apoyo, capacitaciones gratuitas de Sercotec o Corfo, y a los regímenes tributarios simplificados (como el Pro Pyme Transparente), diseñados para que el pequeño empresario pague menos y se complique menos la vida.
  • Proyección de Marca y Confianza: Emitir un documento legal te da un aire de seriedad y profesionalismo. El cliente confía más en un negocio que emite boleta que en uno que pide "solo transferencia y en efectivo".

En resumen, la formalización te saca de la categoría de "vendedor de pasillo" y temete en la de "Empresa". Es la única manera de construir un valor que va más allá de tu propia hora de trabajo.


🔥 Conclusión: el despertar del emprendedor

La era del e-commerce informal está terminando. El SII tiene la tecnología y la ley de su lado. El riesgo de ser "pillado" está aumentando. El mensaje es simple: Si estás generando ingresos de manera regular, considera ese dinero como una actividad económica formal. Ignorar las señales del SII es arriesgarse a multas, recargos y al peor enemigo de todo emprendedor: la incertidumbre legal.
Mejor iniciar actividades con un régimen simple y dormir tranquilo, que intentar una gimnasia  financiera que hoy el SII, con su IA mirando tus 51 transferencias de junio, va a desarmar en 5 minutos.


🧐 En resumen…

Aquí vimos que:

  • El umbral de riesgo es bajo: 50 o más transferencias de distintas personas en un mes disparan la alerta bancaria al SII.
  • La Venta es Renta: Cualquier ingreso generado por un producto o servicio (aunque sea por RR.SS.) debe ser declarado mediante el Inicio de Actividades.
  • La Formalización es Inversión: Te da acceso a la Facturación B2B, créditos bancarios y a los beneficios y regímenes simplificados para Pymes.


🚀 P.D.: 3 Pro Tips para iniciar actividades


  1. Define tu categoría: Si vendes productos o tienes un negocio (tienda), eres Primera Categoría (debes emitir boletas de ventas). Si prestas servicios profesionales (diseño, asesoría), eres Segunda Categoría (emites Boletas de Honorarios). Averigua bien.
  2. Usa el Régimen Simplificado: Si eres una Pyme o microempresa, el SII tiene regímenes tributarios simplificados (como el Pro Pyme Transparente). Son menos complejos que el régimen general y están diseñados para que no te compliques la vida. ¡Aprovéchalo!
  3. Boleta electrónica gratuita: No necesitas comprar software caro. El SII tiene un sistema de Boleta Electrónica gratuito. Úsalo. No hay excusas para no emitir el documento legal.