¿Viste esa persona en tu pega, esa que siempre, SIEMPRE, sabe cómo desenredar la madeja? Le tiras un problema que parece el nudo de un cable de audífonos que estuvo 5 años en el fondo de tu mochila (o sea, irresoluble), y en 15 minutos vuelve con un camino claro.
Y tú, con el ceño fruncido, pensando: "¿Cómo lo hace? ¿Será que tiene un máster en Ingeniería de Nudos Complejos? ¿Un contacto en la CIA?"
Nada de eso. El secreto para resolver problemas de verdad, esos que te quitan el sueño y hacen que tu inversor interno se ponga a llorar, no está en una fórmula esotérica de cinco pasos ni en un retiro de silencio en la montaña (aunque lo segundo no suena mal).
Está en un principio simple y ridículamente subestimado: Descomponer.
Piensa en cualquier problema complejo. Da igual si es:
Todos tienen algo en común: son una masa amorfa de dificultad. Intentar atacar el 20% de gasto de golpe es como intentar comerse un cordero entero de un solo bocado. Te vas a ahogar, vas a hacer un papelón y lo más probable es que termines pidiendo delivery.
El método (o principio) de la Ración Controlada es la filosofía de la gente que soluciona cosas, y se resume así:
“Un problema es complejo solo porque hemos dejado que sus partes se mezclen. Deshace esa masa amorfa en porciones tan pequeñas y sencillas que resolver cada una de ellas se sienta como marcar una simple casilla en tu lista de súper”.
Cuando tienes que aumentar la retención en ese famoso 15%, la gente se paraliza. La cifra es muy grande y el concepto es demasiado gaseoso. El Elefante en la Sala es el problema en su totalidad, intimidante y paralizante.
Problema Original (El Elefante) |
Problemas Descompuestos (Las Raciones) |
La Pregunta Sencilla |
|---|---|---|
Aumentar la retención de clientes en 15%. |
Etapa 1: La gente se va en el primer mes. |
¿Cuál es la queja más común de los clientes nuevos en las primeras 2 semanas? |
Aumentar la retención de clientes en 15%. |
Etapa 2: Clientes inactivos por más de 6 meses. |
¿Qué producto no han usado en 3 meses que podríamos re-ofrecerles con un descuento tonto? |
Aumentar la retención de clientes en 15%. |
Etapa 3: El flujo de soporte es lento. |
Si contratamos una sola persona más en helpdesk, ¿cuántos tickets menos se acumularían al final del día? |
Meta: 15% más de Retención |
Metas Parciales: 5% + 5% + 3% |
Total: 13% (¡Y acabas de resolver casi el 90% del problema principal!) |
El pánico desaparece cuando te das cuenta de que no tienes que "resolver el 15%". Solo tienes que resolver 3 o 4 mini-problemas que, sumados, te acercan o superan la meta.
En el mundo de la construcción y la ingeniería esto no es una filosofía, es un mandamiento. Un ingeniero jamás construiría un puente completo de una sola colada de cemento. Lo hace por segmentos, por pilares, por secciones.
¿El software para un cohete es complejo? Sí, claro. Pero cada pequeña pieza de código, cada función que maneja los propulsores, es, en sí misma, simple y verificable. La complejidad es la suma de muchas simplicidades.
La próxima vez que te enfrentes a un muro de ladrillos que te deprime, haz esto (a esto le llamamos, con cariño, la "Táctica del Mordisco"):
Al final, la productividad no se trata de trabajar más duro (para eso está la cafeína y los audios de 3 minutos de tu jefe), sino de enfocar tu energía en el punto de apalancamiento correcto. Y ese punto de apalancamiento siempre está en la parte más pequeña, la más tonta y la que está más cerca de ser resuelta.
Resolver un problema gigante es cosa de superhéroes de Marvel. Resolver 15 problemas enanos es cosa de personas que se saben organizar.
Así que la próxima vez que te digan "es muy complejo", tú sonríes y piensas: "Ya veremos. Primero, ¿cuál es el primer ladrillo que tengo que sacar de la pared?"
Aquí vimos que para resolver problemas complejos solo necesitas: